este es el mapa de matehuala

La cabecera municipal de Matehuala está llena de nostálgicos rincones envueltos de leyendas, tradi­ciones y personajes que no debe dejar pasar por alto en su visita a esta ciudad: la Iglesia del Sagrario o del Santo Niño de Atocha, el Templo de Nuestra Señora de Dolores del Pueblo, el Mercado Munici­pal, el Hotel Matehuala y la Casa de los Mascaro­nes, entre muchos otros.

La tradición artesanal que la familia Coronado Grimaldo iniciara en 1973, se extiende a nuestros días con la elaboración en hoja de maíz de mu­ñecas con trajes regionales, danzantes, ángeles y diversidad de flores; destacan también los objetos en hierro forjado. Asimismo, otros municipios del Altiplano se distinguen por la creación de origina­les ornamentos: en Moctezuma se da forma a las carpetas para mesa, vitrinas y salas; en Vanegas resaltan los trabajos en mármol rústico.

Teatro Manuel José Othón
Actualmente el centro cultural más importante de Matehuala, inició su edificación en 1906 sobre los cimientos del antiguo Teatro Lavín. Acorde con su época, conserva un estilo arquitectónico porfiris­ta

Plaza de Armas (Plaza 5 de Mayo)
Recorrerla es un auténtico paseo por la historia. Alrededor de su apacible jardín se conservan al­gunas reliquias histórico-arquitectónicas que aún describen su pasado: la Presidencia Municipal (1838), que en 1863-1864 fue sede de los Poderes del gobierno -y por lo tanto capital de la Repúbli­ca- encabezado por Benito Juárez; la Casa de los Portales (XVIII), que recuerda la visita de don Mi­guel Hidalgo en 1811; y el Templo de San Salvador de Orta, del siglo XVIII.

Contrario a la toponimia de su nombre (voca­blo huachichil que significa ¡No vengan! y que era utilizado como grito de guerra contra los españoles), venir a conocer Matehuala es garan­tía de plena hospitalidad. Centro minero, agrícola y comercial, recorrer sus plazas, parques y calles estrechas y bulliciosas, pletóricas de casonas im­pregnadas de historia, sin lugar a dudas hará de su visita una inolvidable experiencia.
Catedral de la Inmaculada Concepción
Soberbia réplica del templo de San José de Lyon, Francia. Obra del arquitecto italiano Adamo Boari (autor del Palacio de Bellas Artes en la Ciudad de México), fue construida en cantera gris a finales del siglo XIX. Conserva en su interior la original imagen del santo patrono de Matehuala, un Cristo hecho en pasta de caña que data del siglo XVI.